Muchos de nosotros pasamos nuestros días en una oficina trabajando en un escritorio, o incluso, ahora con la pandemia como antecedente, pasamos incluso más horas en nuestro hogar trabajando.
Pasamos tanto tiempo en nuestras sillas y en nuestros escritorios que tener muebles de alta calidad es importante para nuestra salud física. Sentarse durante un largo período de tiempo en una postura potencialmente mala o incómoda, puede causar problemas en el cuello, los hombros, la espalda, la columna vertebral, las caderas e incluso en las rodillas ya sea a largo o a corto plazo.
Es por eso que una buena silla de oficina ergonómica te ayudará a sentarte derecho y evitará daños y molestias en la espalda y los hombros. Si bien, cada persona tiene un tipo de cuerpo diferente, no existe un enfoque único para elegir una silla de oficina ergonómica. Afortunadamente, muchas sillas de oficina vienen con la capacidad de poderse personalizar y adaptar perfectamente a un cuerpo único. Encontrar una silla ajustable es el primer paso para encontrar la silla ergonómica adecuada para tus necesidades.
Por el otro lado, es un poco más sencillo encontrar un escritorio ergonómico que una silla ergonómica, ya que normalmente no requieren tantos ajustes para adaptarse a alguien. Lo más importante es tener en cuenta y asegurarse de que haya suficiente espacio libre para las rodillas, de modo que no toquen la parte inferior de la mesa ni golpeen el borde. Tus codos también deben estar doblados cómodamente para que estén rectos desde el codo hasta la muñeca.
Puede que parezcan nimiedades, pero el mantener una postura correcta a lo largo de la jornada laboral, ayudara mucho a que tus músculos no se lastimen y eventualmente acabes con malestares que, si bien, se pudieron haber evitado.
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